Aunque la decoración base de mi árbol de navidad no la cambio cada año sí que busco añadirle algo diferente para que no parezca siempre el mismo, este año he hecho pompones de lana para colgar.
Lo tenía pensado desde hacía tiempo y cuando descubrí que había un aparato para hacer pompones lo tuve claro. No sabía que existía pero leyendo un post de La señorita Pérez aluciné. Enseguida pregunté por el en la mercería y me compré un juego que trae dos, uno pequeño y otro grande.
Son facilísimos de hacer y puedes que tengas por casa. Por si no entiendes bien el funcionamiento de este cachivache te he preparado un tutorial para que no te quede ninguna duda.
Materiales
Elaboración
Simplemente tienes que abrir la base e ir enrollando la lana. Que quede bien cubierto el hueco del centro para que tu pompón salga bien frondoso.
Haz lo mismo en el otro lateral.
Cuando lo tengas listo cierra las asas. De esta forma todos los trozos están bien seguros y no se te van a escapar cuando cortes la lana.
Ahora sí, sírvete de la guía central para ir cortando la lana.
Como ves, en la parte central queda hueco para pasar una tira de la misma lana y anudarla fuerte para que no se escape nada.
Es el momento de abrir los laterales y separar la mitad superior de la inferior para liberar el pompón.
No te asustes cuando lo veas porque aún le queda el toque final, cortar las puntas. Saca tu alma de peluquera y empieza a darle forma. Ten cuidado y no te pases o te quedas sin pompón. Solo tienes que cortar las partes más largas.
Una vez listo anuda el sobrante de lana de cuando hiciste el nudo ya que te servirá de colgador.
Haz todos los que quieras, como ves se hacen en un momento y el resultado es genial.
Muy bien, ya están listos para colgarlos en tu árbol. Puedes hacerlos de diferentes colores y tamaños y utilizarlos también para decorar el resto de la casa.
Y recuerda que puedes coger un montón de ideas navideñas en esta sección.